Considerada una de las torres de vigilancia más representativa de entre las torres medievales del siglo XIV.
Es de planta cuadrada de seis metros de lado con gruesas paredes de mampostería, en su terraza superior tiene aún conservado el matacán (parapeto que rodea toda la terraza), apoyado en ménsulas triangulares.
Su altura es de 10 m, y tiene dos pisos, cuando la mayoría de este tipo de torres suele tener tres.
Actualmente forma parte de una vivienda de titularidad privada y ha quedado integrada en el conjunto de casas de construcción posterior.